El mejor descanso

Amar desde los tuétanos sin condiciones 
en un altruismo irrazonable,
sin esperar nada como respuesta
por la mera voluntad de ser un ángel.

Reconfortar al enfermo en su camino,
escuchar con paciencia los problemas
que a menudo nos cuentan los amigos,
acompañar en el viaje hacia el pasado
a los viejos cuando hablan de otros tiempos,
jugar sin complejos con los niños
con la intacta inocencia de su encanto.

Ser una luz en vida que regale
alegrías y buenos momentos,
compañía y satisfacciones
con humildad, abnegación y celo.

Luchar por los que son esclavos
del yugo de las injusticias
mejorando el mundo paso a paso
con piedras de coraje y utopía.

Y morir con la conciencia limpia
de que nuestros actos mejoraron
un poco a las almas afligidas,
sin duda ese es el mejor descanso.

Bl0king